Débora fue la primera matrona de la historia. Descrita en la Biblia, desempeñaba la verdadera profesion más antigua del mundo, y a ojos de muchos entre los que me incluyo, una de las más bonitas actualmente. Ayudar a otra mujer a dar a luz es la esencia viva del ser humano, aunque hoy en día también se ocupa de la mujer durante toda su vida reproductiva y una vez alcanzado el climaterio.
Para poder ser matrona en España, debe poseerse el título de enfermera, realizar un examen de convocatoria anual, que da acceso a un programa de residencia de 2 años en los que la persona rota por diferentes servicios que cubren las distintas necesidades de la mujer. Es decir, un mínimo de formación reglada de 6 años, a los que se suman los años dedicados a la preparación del examen, para el que los últimos años, se presentan unas 15 personas por plaza.
En este momento, me encuentro esperando a que el ministerio revele, por fin, el número de orden (compuesto en un 90% por el examen y un 10% por el expediente) me que permitirá elegir la plaza que quiero, en este caso de matrona. Quedan dos semanas... y se hacen eternas.
